El lunes 3 de mayo pasará a la historia de las tragedias, los damnificados en la CDMX de un nuevo drama que sacudió al país entero y al mundo. En está ocasión, no fue un temblor el culpable de 25 muertos y más de 70 heridos de hermanos capitalinos. Mi más sentido pésame a los deudos. Fue la corrupción, la negligencia y el contubernio de autoridades del gobierno de la capital junto con empresas extranjeras y nacionales dedicadas a la construcción, quienes provocaron la inmoral tragedia.
El sucesor del gobierno de AMLO como jefe de Gobierno, que ocupó el cargo de secretario de seguridad pública del entonces D.F. y que impulsó el tabasqueño a Marcelo Ebrard para gobernar la capital del país en 2006, fue el responsable administrativo y político de la construcción de la Línea 12 o Línea Dorada del Metro de la Ciudad de México. En su discurso de investidura, anunció la construcción de la también llamada en ese momento la “Línea del Bicentenario”.
La Línea Dorada abarcaría de Tláhuac a Mixcoac y las obras quedarían a cargo de las empresas ICA, S.A. de C.V., Alstom Transport, S.A., Alstom Mexicana, S.A. de C.V. y Carso Infraestructura, iniciando trabajos en 2008. La Línea 12 fue inaugurada en 2012, con prisas y obras inconclusas, a escasos meses de que terminara la gestión de gobierno Marcelo Ebrard. Durante esos cuatro años, siempre se denunció por diversos partidos políticos de oposición y medios de comunicación, sobre precios escandalosos y graves fallas técnicas que presentaba la obra y ponía en peligro la vida de los usuarios.
Sólo para citar algunas denuncias públicas en medios de comunicación. En 2014 el entonces jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera, ordenó el cierre de 11 estaciones de su tramo elevado, tras recibir un peritaje de expertos que indicaba que había peligro en el funcionamiento del Metro por el “desgaste prematuro de rieles y llantas de los trenes”. Las 11 estaciones estuvieron cerradas durante 20 meses hasta que se reabrieron en noviembre de 2015.
Durante todo ese tiempo, Marcelo Ebrard se autoexilió por cinco años en Europa, ya que, habían serios cuestionamientos en dicha obra y existía la posibilidad de fincarle responsabilidad penal y administrativa, huyendo del
país y refugiándose con sus amigos de izquierda en el viejo continente. Hasta que lo rescató López Obrador y lo nombró Secretario de Relaciones Exteriores. ¿No dice Marcelo?, “que el que nada debe, nada teme”. En fin, otro caso más de impunidad y protección política de AMLO a sus corruptos colaboradores.
El colmo del cinismo y la grotesca impunidad, fue que legisladores de MORENA y aliados políticos, impusieron su mayoría en la Cámara de Diputados y rechazaron la propuesta para la creación de una Comisión Investigadora de lo que sucedió en la tragedia de la Línea 12 del Metro, con el pretexto de tratarse de “política carroñera”. De tal suerte, que no se investigará a Marcelo Ebrard, Mario Delgado, Miguel Ángel Mancera y Claudia Sheinbaum, por órdenes de ya sabe quién.
Y también se desploma MORENA en las encuestas de preferencias electorales para este próximo 6 de junio. El apoyo a los candidatos del partido de López Obrador, cayó en 8 de 15 estados donde se celebrarán elecciones a Gobernador, reveló una encuesta publicada por El Financiero. El mismo fenómeno está sucediendo en el caso de diputados federales, locales y para presidente municipal.
Esta nueva tragedia que ha enlutado a la CDMX y al país entero, cobrará aún más la factura política de los corruptos políticos de izquierda que tiene todo México, con AMLO a la cabeza. No olvidemos que: “UN VOTO POR MORENA, ES UN VOTO CONTRA MÉXICO” Catón.
¿No cree usted?
Dr. Carlos Díaz Abrego
DR