Durante el fin de semana surgió información que aseguraba que la Fiscalía General de la República (FGR) había pedido la extradición de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México durante el gobierno de Felipe Calderón.
García Luna se encuentra detenido desde diciembre del año pasado en Estados Unidos acusado de recibir sobornos del Cártel de Sinaloa y los Beltrán Leyva a cambio de información y protección, incluso lo señalan de traficar al menos 52 toneladas de droga.
Esta información generó sospechas de que el gobierno mexicano intente “rescatar” a García Luna como lo hizo con el exsecretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, quien también fue detenido por nexos con el narcotráfico en Estados Unidos y un mes después, por intervención de México, le retiraron los cargos y repatriaron como un hombre en libertad.
El abogado de García Luna, César de Castro, se posicionó al respecto. Dijo que no ha habido conversaciones con el gobierno mexicano sobre una intervención al estilo de Cienfuegos.
A pregunta expresa del periodista Keegan Hamilton, De Castro dijo: "No tengo idea de por qué esto es noticia ahora (la petición de extradición), ya que dicen que buscarán su extradición después de que haya terminado (el proceso legal) aquí (en Estados Unidos)”.
Desde que García Luna fue detenido en Estados Unidos el gobierno de México y la FGR han realizado investigaciones contra él.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha congelado sus cuentas bancarias y la FGR comenzó la carpeta de investigación que posiblemente derivó en la solicitud de extradición dada a conocer el fin de semana.
Durante la conferencia mañanera de esta semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo desconocer información al respecto sobre la solicitud de extradición.
“No tengo información sobre eso, es un proceso que lleva la Fiscalía y se actúa en este y en otros casos con independencia, con autonomía, es lo que puedo comentarte".
Cuando el canciller Marcelo Ebrard informó sobre la repatriación de Cienfuegos, fue cuestionado sobre por qué no se hizo lo mismo con García Luna, respondió que el exsecretario de Seguridad reside, tiene operaciones y lo acusan de delitos cometidos en Estados Unidos, además, dijo, no solicitó ayuda de las autoridades mexicanas.
El delito por el que se pide la extradición es el de enriquecimiento ilícito, lo cual coincide con los señalamientos en Estados Unidos de sobornos recibidos por el narcotráfico.
La FGR cotejó sus declaraciones patrimoniales, bienes inmuebles y detectó que sus inversiones "evidentemente no coincidían con lo que él había percibido por salarios y otros ingresos".
SI COOPERA EN CINCO AÑOS PODRÍA ESTAR LIBRE
En entrevista con La Silla Rota, el periodista y escritor J. Jesús Esquivel explicó en enero pasado que García Luna, si colabora con las autoridades estadounidenses, podría estar libre en cinco años.
Se declararía culpable, evitaría el juicio, señalaría a más personas implicadas y evitaría la cadena perpetua para recibir una sentencia de 10 años que podría ser de hasta cinco años si así lo recomiendan las autoridades estadounidenses por su colaboración.
Tras cumplir esta breve condena, detalla Esquivel, García Luna sería deportado a México, momento en el cual el gobierno mexicano tendría que hacer efectiva una orden de aprehensión en su contra, sino, conservará su libertad.
LAS ACUSACIONES CONTRA GARCÍA LUNA
La Fiscalía de Nueva York acusa a García Luna de conspiración por tráfico de cocaína y de hacer declaraciones falsas. Genaro habría recibido sobornos multimillonarios del Cártel de Sinaloa para que éste operara con impunidad en México.
"García Luna está acusado de aceptar millones de dólares en sobornos del Cártel de Sinaloa, mientras controlaba la Policía Federal y era responsable de garantizar la seguridad pública en México", dice la acusación en su contra.
A cambio del pago de sobornos, continúan los señalamientos, el Cártel de Sinaloa obtuvo "un pasaje seguro" para sus envíos de drogas, información confidencial de las fuerzas del orden mexicanas e incluso información sobre cárteles rivales.
En dos ocasiones, el Cártel de Sinaloa entregó personalmente sobornos a García Luna en maletines que contenían entre 3 y 5 millones de dólares, especifican los señalamientos.
Según los registros financieros obtenidos por el gobierno estadounidense, cuando García Luna se mudó a los Estados Unidos en 2012, había acumulado una fortuna personal de millones de dólares.
Durante el juicio contra Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo", surgieron varias de las acusaciones contra García Luna.
Uno de los testigos de las autoridades estadounidenses, Jesús "El Rey" Zambada, hermano de Ismael "El Mayo" Zambada, acusó a García Luna de recibir primero 50 millones de dólares de los hermanos Beltrán Leyva, cuando estos eran aliados del Cártel de Sinaloa.
Luego, detalló el propio Zambada García, le dieron 6.5 millones de dólares más Genaro.
Esto sucedió durante los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, refieren las palabras de Zambada García.
A Zambada García se han sumado testigos como Sergio Villareal, "El Grande", excabecilla del cártel de los Beltrán Leyva, liberado en Estados Unidos tras acogerse en el programa de testigos protegidos.
Así como Iván Reyes Arzate, "La Reyna", exenlace de la Policía Federal con la Administración para el Control de las Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), detenido en 2017 en Estados Unidos acusado de recibir sobornos del narcotráfico a cambio de información y protección.
En la última acusación contra García Luna, la fiscalía de Nueva York incluyó a sus dos hombres de mayor confianza: Luis Cárdenas Palomino y Ramón Pequeño García.
En esta nueva acusación detalla que Genaro tráfico más de 50 mil kilos de cocaína del Cártel de Sinaloa de mayo del 2002 a septiembre del 2008, cuando era jefe de la extinta Agencia Federal de Investigaciones (AFI) en el sexenio de Vicente Fox y luego secretario de Seguridad Pública Federal durante el gobierno de Felipe Calderón.
rgg