Un brutal asesinato a conmocionado a todo Perú, cuando la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) de la Policía Nacional del país sudamericano detuvo a Roberto Ramírez Caycho, un joven de 18 años de edad.
El detenido es acusado por el homicidio de Kevin Corro Aburto, un hombre de 28 años de edad que había sido reportado como desaparecido desde diciembre pasado.
La conmoción vino cuando medios de Perú divulgaron la confesión del presunto asesino, quien -dijo- había asesinado a Kevin por haber abusado sexualmente de su hermano menor, de 15 años de edad.
Roberto y Kevin eran amigos y presuntamente comenzaban a mantener una relación sentimental.
En una de las visitas del sujeto de 28 años a la casa del joven 10 años menor que él, este último le pidió su celular, al revisarlo encontró en su galería una serie de videos donde Corro Aburto abusa sexualmente del hermano de Ramírez Caycho.
“Yo le pido su celular a él, que me lo preste, y en su galería encuentro videos haciendo tocamientos indebidos a mi hermano”, relató Roberto Ramírez Caycho tras su detención.
Tras ver los videos, dijo, le entró “un montón de cólera y furia” lo que derivó el asesinato de Kevin Corro Aburto.
“Lo amarré a una silla con cadenas y sogas para que no pudiera moverse”, relató el presunto asesino a los oficiales.
Entonces, Ramírez Caycho cuestionó a Kevin sobre el abuso sexual contra su hermano, este lo negó hasta que le enseñó los videos de su celular: “Le dije, ‘estuvimos nosotros, pero a mi hermano no puedes tocarlo’.”.
Para que no le hiciera daño, el joven de 18 años le exigió dinero: “Le pedí plata para que no lo tocara”.
Sin embargo, eso no sucedió. Roberto Ramírez Caycho le cortó el cuello a Kevin con un cuchillo, luego descuartizó el cuerpo y lo esparció por un cerro cerca de su casa.
De acuerdo con autoridades peruanas, el presunto asesino no actuó solo, amigos y familiares le ayudaron a deshacerse del cuerpo de la víctima.
Algunos supuestos cómplices del asesinato ya fueron detenidos, entre ellos un menos de edad y un venezolano quien tenía consigo el celular de la víctima.
rgg