La ciudad zapatera, está en pausa. Una pausa que no se sabe cuánto durara. Sus calles están vacías. Los comercios cerrados. La poca gente que camina en las calles, es la viva imagen de que algo peligroso los acecha. Todos caminan rápido, nadie permite que otras personas se les acerquen. Y todos, tienen cubrebocas. Algo malo pasa en las calles, y no se sabe dónde está.
León, Guanajuato lleva 59 días de cuarentena por la pandemia por Covid-19. El nuevo virus azota el mundo entero con su alto índice de mortalidad. El extraño patógeno, apareció por primera vez en China, en diciembre de 2019. La mortal epidemia, tiene en emergencia sanitaria a casi todo el mundo. Y nadie sabe cuándo acabará. Mucho menos se sabe, si pronto podría encontrarse el antídoto.
Por primera vez las palomas de la Fuente de los Leones, disfrutan en medio de una extraña calma.
Las medidas implementadas para la seguridad de los ciudadanos llevaron a las autoridades a limitar el acceso al Centro de la ciudad. Un Centro Histórico que nunca para. Un centro lleno de comercios, de todos los colores y de todos los tipos. Un Centro Histórico utilizado por muchos, para el paseo de los fines de semana. Pero desde hace 59 días la historia de este lugar cambió.
Los 7 accesos a la zona peatonal están bloqueados por vallas.
El espacio público más concurrido por los leoneses, luce totalmente vacío. Los comercios no esenciales fueron obligados a cerrar. Solo unos pocos, están abiertos. El acceso a este sitio, es restringido. Los motivos para permitir el paso, son muy pocos. Y solamente puede acceder una persona por familia. Siempre y cuando, utilice su cubrebocas y guarde su sana distancia.
Sin cubrebocas es imposible acceder al centro de la ciudad.
El Centro Histórico y sus pasajes peatonales extrañan el movimiento citadino. Un movimiento que le da vida a los lugares emblemáticos de León. Tal cual es el caso del Centro de la ciudad. Un centro que ahora corresponde al de una ciudad fantasma.
En la sombra de los pasajes, nadie espera.
Lo más difícil para las autoridades es hacer que la gente crea en la peligrosa enfermedad. La incredulidad de algunas personas, es el enemigo principal, después del propio Covid-19. Mismos que no respetan la cuarentena y salen a las calles sin miedo.
La dificultad más grande para las autoridades, es la gente incrédula.
Hoy no se sabe cuándo los comercios podrán abrir. Lo que sí sabe, es que los contagios por coronavirus están aumentado y desde hace varios días una o más personas fallecen a diario a causa del virus. Y mientras esa curva de contagios siga creciendo, la ciudad seguirá parada.
Son muy pocas las personas que logran entrar al primer cuadro de la ciudad.
En León se han registrado 208 casos positivos de coronavirus; 57 ya se recuperaron y 7 fallecieron. Del total de casos confirmados en la ciudad 170, han sido por transmisión comunitaria. Hay además, 344 casos en investigación (corte al jueves 14 de mayo).
Las calles esperan por nosotros, y nosotros esperamos volver pronto a ellas.