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VIDEO/ Eduardo Hernández, el párroco que hacía misas con marionetas

La muerte del sacerdote estremeció a los feligreses. Un sacerdote innovador y con iniciativa había sorprendido a más de uno. Los niños volvían a la iglesia

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Escrito en GUANAJUATO el

El párroco Eduardo Hernández Rodríguez fue llamado a servir a Dios en su juventud. A los 25 años de edad se ordenó como sacerdote en la Catedral de La Madre Santísima de la Luz en León. Sí, el clérigo que recién falleció y provocó una ola de comentarios por la causa de su muerte, era leonés.

El nombre del siervo de Dios, mejor conocido como el padre Lalo será recordado como un sacerdote que se esmeraba en atraer la comunidad a la iglesia. Un sacerdote innovador, activo, cálido y para muchos feligreses, un muy buen amigo.


La última parroquia que dirigió fue la de San Pedro de los Hernández, una colonia aún rural de León Guanajuato. Su repentina muerte dejó un gran vacío en los fieles actuales y en muchas otras comunidades que dirigió. Era realmente un sacerdote popular, y muy querido.

Cuando los niños no querían entrar a misa, y armaban un berrinche en el atrio de las diferentes iglesias de la ciudad, alguien seguro, se acercaba a ese papá o mamá en apuros, y recomendaba -llévalo a las misas del padre Lalo, allá en San Pedro de los Hernández. Ese sacerdote hace las misas con marionetas. A los niños les gusta mucho-.

Esa peculiar característica, pronto empezó a recorrer los oídos de los leoneses. ¿Un sacerdote, qué hace misas con marionetas? Difícil de creer. Pero era real y en San Pedro estaban encantados. Sin duda la Arquidiócesis de León sufrió una gran pérdida por su muerte. Un sacerdote con iniciativa, hace mucho que no se veía en la región.

El Pecas, fue el mejor amigo del sacerdote en los últimos años.

Fue su fe y su hambre de compartir la palabra de Dios, lo que lo llevó a la muerte. El fallecimiento del párroco Eduardo fue repentino. En menos de 5 días su salud empeoró. Y su cuerpo perdió la batalla. El sacerdote de 59 años de edad, era aparentemente sano, pero padecía diabetes. La causa de su muerte fue por ‘neumonía’, de acuerdo a información de sus feligreses. Sin embargo, el rumor por un posible contagio de Covid-19 corrió rápidamente por todo León.

La Dirección de Salud municipal pidió en una publicación que -todas las personas de San Pedro de los Hernández que recientemente participaron en celebraciones de la iglesia, acudieran a realizarse una prueba de Covid-19, lo antes posible-. Argumentaron que se habían registrado 2 contagios en la colonia, y uno de ellos había acudido a la misa del 2 de mayo. La ceremonia religiosa, fue oficiada por el párroco Eduardo Hernández.

Las celebraciones del clérigo en fin de semana, solían llenar la parroquia.

La salud del párroco se agravó para el 4 de mayo. El 9 se anunció su fallecimiento.

Sin especificarse la causa de la muerte, la Arquidiócesis informó que una ‘enfermedad intempestiva’ puso al sacerdote en gracia de Dios. Lamentó la imposibilidad de una despedida pública, ante las medidas por la emergencia sanitaria.

Sin una causa clara y con la invitación de la municipalidad, el extraño vínculo entre la muerte del padre y los casos positivos cercanos a él, dieron para creer que la muerte del sacerdote fue por coronavirus. A esto se le sumó, la descripción de defunciones otorgadas por Salud del estado, el 10 de mayo. La número uno decía que: Defunción 1. Masculino 59 años residente de León fallece en el HRAEB comorbilidades Diabetes Mellitus. Las características correspondían con los datos del párroco. A él, también lo ingresaron al Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío.

Las marionetas eran las más aclamadas por los niños de San Pedro de los Hernández.

A tres días del fallecimiento, no se ha dado a conocer la causa real del fallecimiento. Y a pesar de la incertidumbre generada, no se compartirá por la privacidad del paciente y su familia. Por su parte la parroquia aseguró que el sacerdote no falleció por Covid-19. Horas después la publicación desapareció de su red social.

EL SACERDOTE QUE ROMPIÓ LAS REGLAS

En el tiempo del confinamiento, decretado en la ciudad, el sacerdote se popularizó en la red social de la parroquia de San Pedro Apóstol. Después de que a la iglesia se le prohibió realizar celebraciones públicas, ante la pandemia por coronavirus, la parroquia emigró sus actividades a transmisiones en vivo. Las misas transmitidas por la red social tuvieron éxito. La gente las seguía. Todos los días, desde marzo el sacerdote oficiaba la celebración para todos sus fieles.

Fotografía de la procesión del 2 de mayo liderada por el padre Lalo, en San Pedro de los Hernández.

Pero, sus actividades religiosas no solo se quedaron en la web. El padre Lalo, sacó a Jesús del sagrario y lo llevo a las calles de San Pedro. En procesiones encabezadas por el párroco y resguardas por unas 6 personas más que le acompañaban, recorrieron una y otra vez las diferentes calles de la comunidad.

En la procesión, el padre Lalo se acercaba demasiado a los creyentes. Solo un cubrebocas y la bendición de Dios lo protegían.


ZP