Siempre está en las calles del centro, es seguro verlo sentado en cualquier banca o caminando con el peso de sus mochilas, en las que solo él sabe lo que lleva. Tal vez carga la realidad de no saber a dónde ir, o el peso de los días que corren sin tiempo ni reloj.
Le dicen ‘El Mochilas’, un indigente que camina por el Centro Histórico de León todos los días. Ese es su rumbo. Un vagabundo que se ha apropiado de esta zona, su zona. Un personaje épico que le pertenece a León. La mayoría de la gente lo conoce.
Algunos aseguran que ‘El Mochilas’ fue un cineasta con calibre. Al que ubicaban como Palomo Falaz. Un hombre que tomó su cámara y filmó las mejores historias. “El mejor cineasta de todos los tiempos” dice uno de sus admiradores en el documental ficticio de su historia.
A veces utiliza lentes sin cristales, o también oscuros. Se pierde en su mundo en las horas pico en dónde mucha gente lleva prisa y camina frente a él
Lo recuerdan como un buen maestro. Alguien que alcanzó la cima del éxito en el Festival de Cannes del 89. Un profesor que enseñó “lo que era el cine”. En "Mochilas" mockumentary, se relatan las diferentes versiones de su vida, según los comentarios que la gente hizo a Omar Gutiérrez Neri, el creador de esta historia.
Omar recolectó los diferentes recuerdos que la gente vinculaba con ‘El Mochilas’. Pero como fue muy difícil comprobarlo, se aventuró a grabar su historia con la ayuda de actores que narraron como era este vagabundo.
‘El Mochilas’ tocó la fama por sus películas, y después de tenerlo todo se desapareció. Ya no supieron nada de él. Se alejó de la industria cinematográfica y de los reflectores. Luego sus propios alumnos lo vieron caminar por el centro, pero ya no era el mismo. Tenía lentes sin cristales, se dejó crecer los pocos bellos de su barba, estaba sucio y usaba ropa vieja. Cargaba mochilas, y de ahí se le quedó el nombre.
Uno de sus admiradores confiesa que ''El Mochilas'' era el mejor cineasta. (Foto: captura de pantalla de Mochilas Mockumentary)
Quienes lo miraron de nuevo no lo creían. Y tomaron este cambio como una reflexión. Aquel que era su maestro se volvió un indigente que va en busca de comida.
‘El Mochilas’ es de pocas palabras. Si te acercas a él y le hablas no contesta, solo mueve la cabeza. Asienta o niega. Camina lento y casi siempre está cerca de la tienda Coppel Reforma. Usa botas y va cargado. No se sabe que es lo que trae en sus mochilas, aunque a los lejos se han visto botellas de plástico y nada más. Solo él sabe lo que carga. Es como si coleccionara morrales de cualquier tipo. Siempre y cuando le sirvan para guardar algo, aunque sea los pocos residuos que recoge de los botes de basura.
Ponerse sus mochilas parece un ritual, son muchas. Parece alguien con la sensación de tener todo ordenado, colgado de sus hombros.
Una vez un fotógrafo se le acercó para ver si podría tomarle un retrato, y cedió. En la foto tomada de lejos, su postura es relajante. Sentado sobre una banca, perdido en el tiempo mientras la gente del centro camina apresurada o los niños compran un globo. O mientras las palomas van por la comida que ofrecen los señores de las bancas verdes de la plaza.
El personaje es reservado y no habla, solo deambula por la ciudad
‘El Mochilas’ sigue en las calles en medio de una pandemia. Como si fuera inmune. No usa cubre bocas ni gel antibacterial. Anda por la calle todo el día, es su refugio. No se sabe si tiene casa o alguien que lo espere. Lo que se sabe es que este personaje le pertenece a León. Algunos lo recordarán como Palomo Falaz.
El cortometraje sobre la historia ficticia de este personaje fue premiado en el Central America Short Fil Festival (CINECAFEST) de Miami Florida. Omar Gutiérrez Neri y sus amigos lo echaron a andar en el 2014, en la edición del Lab//KinoRoom. Esta historia le dio la vuelta a Estados Unidos y Guanajuato.