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Policías estatales liberan a dos víctimas de secuestro virtual en Celaya

Fueron mantenidos bajo amenazas durante varios días encerrados en un hotel de la localidad; personal del hotel hizo el reporte a las autoridades

Escrito en GUANAJUATO el

Celaya.- Elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE), liberaron a un par de personas que aparentemente fueron víctimas de un secuestro virtual. Se encontraban hospedados en un hotel de la localidad, y fueron mantenidos en ese lugar bajo amenazas.

El hecho ocurrió, cuando elementos de las FSPE al implementar labores de vigilancia en esta ciudad, recibieron reportes por parte de personal de un hotel, refiriendo que dos personas del sexo masculino se encontraban hospedados desde días anteriores, pero sin salir de su habitación, por lo que causó extrañeza al personal y por ello decidieron solicitar el auxilio de las autoridades.


Al arribar los elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado al hotel en referencia, ubicado sobre la carretera alterna Celaya-Villagrán, localizaron a dos hombres aún encerrados en habitaciones diferentes, por lo que los efectivos estatales se identificaron para ofrecerles ayuda.

Un vez que las dos personas abandonaron sus respectivas habitaciones, al entrevistarse con los elementos estatales, informaron que habían recibido llamadas telefónicas donde les ordenaban (bajo amenazas) mantenerse ocultos en un hotel, en tanto les ordenaban que debían comunicarse con sus familiares para que realizaran un deposito en efectivo para “su liberación”.

Luego de la intervención de las FSPE y la liberación del secuestro virtual, se dio vista a la autoridad competente.

LOS SECUESTROS VIRTUALES

Cabe señalar que los secuestros virtuales son hechos que se inician a partir de una llamada telefónica en la que se simula el secuestro de un familiar o conocido de la persona que atiende el teléfono, con la finalidad de forzar la entrega de dinero u otros objetos de valor como “rescate”.

A diferencia de los secuestros reales, nadie se encuentra privado de la libertad ni corre riesgo físico alguno.

En estos casos, la víctima es la persona que recibe la llamada telefónica.

En la gran mayoría de los casos se simula directamente un secuestro, pero puede ocurrir que el engaño comience con el supuesto accidente de un familiar o allegado. En estos casos, se finge llamar desde un hospital o comisaría para lograr obtener más información, y después se exige el pago de un “rescate”.

JP