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Piden indemnización para comandante asesinada; tenía dos hijos

El finiquito de Maricela aún no llega. La Secretaría de Seguridad de Celaya no lo ha autorizado. También les falta pagar el Seguro del Banco y el Seguro de Vida

Escrito en GUANAJUATO el

Maricela era una mujer fuerte, trabajaba como Comandante de la Policía de Celaya. La asesinaron el 22 de marzo, afuera de su propia casa, cuando bajó de su departamento para conectar la bomba de agua. Ese día, dejó a dos pequeños en orfandad, dos niños y una familia que no han recibido la indemnización de su muerte.

Los parientes de Maricela no han recibido el finiquito de la comandante. El Oficial Mayor Abraham Rodríguez informó para El Sol del Bajío que la Secretaría de Seguridad Ciudadana no ha autorizado el pago de su dinero a los familiares de la víctima.

Maricela Patiño Mendoza

Para pagar el efectivo correspondiente, el Oficial Mayor tiene que recibir la indicación de las autoridades. Por lo pronto, los dos pequeños que perdieron a su madre tendrán que esperar para recibir el dinero que les corresponde.

La familia de Maricela tampoco ha recibido el Seguro del Banco, ni el Seguro de Vida. Esto pasará hasta que las autoridades municipales lo autoricen.

Esta es la colonia en dónde vivía Maricela 

Según la Secretaría de Seguridad Ciudadana esta indemnización implica todo un proceso. Pues cada que un elemento haya renunciado, lo hayan despedido o haya muerto se debe hacer un procedimiento interno para conocer la situación de resguardo de algún equipo o material de trabajo. Esto quiere decir que en caso de que Maricela tuviera pendiente una entrega de equipo de trabajo, se analizaría la reposición.

Ya pasaron 15 días de la muerte de Maricela. Quince días en los que sus familiares no han recibido respuesta por parte de las autoridades, quienes prometieron que la próxima semana se definirá el finiquito de la comandante de Celaya.   

El día de su partida

El domingo 22 de marzo la colonia San Juanico se paralizó. Los vecinos escucharon balazos entre las calles Casuarinas y Brillante. Esa noche la comandante Maricela había sido asesinada.

Maricela disfrutaba de su día de descanso. Bajó de su departamento para conectar la bomba de agua, pero no se dio cuenta que dos hombres la esperaban para atacarla a balazos. Le dispararon a corta distancia y su cuerpo cayó sobre la calle. Ahí falleció. Le arrebataron la vida a una madre de dos pequeños, en un día.

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