Las puertas de la tienda “Nuevo Mundo” se abrieron en 1904, con lo que se convirtió en uno de los negocios más icónicos y populares entre las y los irapuatenses hace más de 100 años.
Según los datos proporcionado por personal del Archivo Histórico Municipal, esta casona pertenecía a Matilde Bayas de Barquín, quien dio en arrendamiento el edificio ubicado en la calle Mina, ahora conocida como Juárez, en pleno Centro Histórico de Irapuato.
Los integrantes de la Sociedad Barquín, administraron la tienda hasta junio de 1926, año en que pasó a manos de los miembros de la sociedad mercantil, “José Porres y Compañía”.
La casona, era un edificio conformado por seis arcos en la fachada y dos pisos, para la venta de ropa y otros productos, recinto ubicado a un lado de la bonetería, ‘La Universal”, que en nuestros días es una pizzería, ubicada en la esquina de la calle conocida como De Nuestra Señora de la Misericordia, ahora, Cortazar.
En 1964, el edificio que albergaba la tienda, fue demolido. Cuatro años después, en febrero de 1968, se reconstruyó un edificio con una fachada similar, para inaugurar la tienda Sears de Irapuato, como parte de las sucursales de la cadena norteamericana, en México.
Al día de hoy, la tienda Sears sigue funcionando y es una de las más populares entre la población que visita el Centro Histórico además de ser un punto de reunión de la ciudadanía en las escalinatas.
KD