Ver lluvias en Guanajuato se ha vuelto menos común. Las presas secas y los ríos con poca agua advierten un cambio climático, que según expertos, es hora de comenzar a ver y solucionar.
Sí, en el estado hay escasez de lluvias, afirmó el meteorólogo Marcos Irineo Esquivel, del Centro de Ciencias Atmosféricas de la Universidad de Guanajuato. Pero ¿Por qué no llueve? En entrevista para La Silla Rota explica los fenómenos climatológicos que provocan esta escasez, que aseguró, podría durar más tiempo.
“Esta escasez se ha venido notando desde septiembre, octubre (…) las precipitaciones están debajo del promedio debido al fenómeno de “la niña”, lo que se espera en este año es que siga este enfriamiento del lado del pacífico, esto altera los patrones de lluvia y eso provoca que a Guanajuato lleguen pocas precipitaciones”.
La falta de lluvias es porque las precipitaciones están por debajo del promedio normal. Según el meteorólogo, esto también es una consecuencia del calentamiento global que provoca una alteración en los patrones de lluvia.
“EL 2014 FUE UN AÑO MUY SECO”
A pesar de esta sequía, el 2021 no es el “peor” año, pues en el 2014 el estado resintió una mayor sequía, mencionó Marcos Irineo. Esto se debe a los fenómenos de “el niño” y “la niña”. El primero llamado así porque el agua de los océanos se calienta más de lo normal, y el segundo por el efecto contrario.
“Ha habido fenómenos de niños muy intensos que han provocado sequías, como en 1982 y 1983, que en esos años se provocó un niño muy intenso, hubo sequías fuertes en México. En el 2014 y 2015 hubo periodo de un “niño muy intenso” y las precipitaciones fueron escasas”.
Por ejemplo, en el 2014 la escasez de lluvias fue tan fuerte en varios municipios, que al comparar con las precipitaciones del 2020 la diferencia fue basta.
“En Dolores Hidalgo la lluvia del 2014 fue de 204 milímetros y en 2020 de 286 milímetros, hubo más agua en este último año”, explica el meteorólogo de la UG.
Ya en el 2015 hubo una recuperación, las lluvias llegaron. Pero el experto asegura que “el 2014 fue un año muy seco” para Guanajuato.
Y es que, el día en que nos quedemos sin agua podría aproximarse, señalan expertos. El Día Cero es un tema que se ha puesto sobre la mesa luego de que el Instituto de Recursos Mundiales (WRI por sus siglas en inglés) advirtiera que Guanajuato es uno de los 15 estados con alto riesgo de quedarse sin agua. Los motivos: el estrés hídrico, sobreexplotación o un mal manejo del recurso.
El Servicio Meteorológico Nacional también advierte un crítico panorama, en el monitor de sequía de México, con corte al 15 de marzo, Guanajuato aparece con sequía severa, solo antes del nivel de sequía extrema y excepcional.
Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Nuevo León, Tamaulipas, Zacatecas, Aguascalientes, Jalisco, Colima, CDMX, Querétaro,
Morelos, Hidalgo y Guanajuato son los lugares calificados como "extremadamente alto" para el desabasto de agua.
LLUVIAS EN ABRIL, LA ÚNICA ESPERANZA
En este contexto, Marcos Irineo explica que la situación climatológica podría mejorar entre abril y julio, pues nuevamente se registrarán lluvias en el estado. Pero de agosto a noviembre la escasez podría golpear nuevamente.
“La situación de las lluvias va mejorar un poco, de acuerdo a los modelos de simulación numérica (…) a partir de abril las lluvias van a estar dentro de lo normal en Guanajuato (…) después de agosto hasta noviembre las precipitaciones estarán debajo de lo normal”.
¿Alguna vez te habías puesto a pensar en el agua que puede desperdiciar una alberca infantil?
Seamos conscientes y cuidémosla.#CuidaElAgua#Sapal pic.twitter.com/Xx9tplzFqj— Sapal León (@Sapalleon) March 30, 2021
A la falta de lluvias se suma el tema de las temperaturas. “Entre abril y mayo habrá más calor de lo normal, de junio a julio la temperatura será normal, y a partir de agosto arriba de lo normal”. Lo que quiere decir el experto es que las lluvias deberán ser aprovechadas, así como el suministro de agua para que el líquido no falte cuando las temperaturas suban.
“Hay que aprovechar las lluvias que vienen porque el calor va continuar, el calor evapora el agua, entonces mientras más calor tengas las presas van a bajar de nivel”.
¿CÓMO PODEMOS AYUDAR?
Con una voz de preocupación, del otro lado del teléfono, el meteorólogo afirma que el cambio climático y la escasez de lluvia es un problema que debería ocuparnos a todos. Aunque afirma que es un fenómeno “incontrolable” por el ser humano, lo que sí se puede hacer es adaptarse a las nuevas condiciones para cuidar el agua.
“Lo que debe hacer la gente en general, es adaptarse a los cambios, tengo que ver cómo me pude impactar las temperaturas altas, la escasez de agua. Lo que tienen que hacer las autoridades es planear en función de lo que ofrece la naturaleza. Tienen que tener unos buenos pronósticos para saber cuánta agua se puede retener, cuanta se puede dar a la población, saber operar las presas, el suministro de agua a la población, cortes periódicos de agua, medidas más estrictas, más severas porque estamos en un periodo donde hay poco”.
EL METEORÓLOGO COMPARTE ALGUNAS RECOMENDACIONES PARA CUIDAR EL AGUA
+ Usa menor cantidad de agua para los quehaceres de la casa
+ Si eres agricultor procura no malgastar el agua y usar la necesaria para cada planta
+ A los funcionarios de la Conagua o de Sapal les recomienda planear la abertura y cierre de las presas para retener la mayor cantidad de agua
+ Estar pendiente del pronóstico del clima, eso te ayudará a tomar mejores decisiones para adaptarte a los cambios
CALENTAMIENTO GLOBAL
El calentamiento global es la causa de los cambios climáticos que estamos viviendo, dice el meteorólogo. Y es que los patrones de lluvias cambian en todo el planeta, y de forma drástica.
“Esto está alterando los patrones de lluvias en todo el planeta (…) donde antes llovía más, llueve menos (…) las presas y los acuíferos se están yendo para abajo. Este tipo de problemas se están acelerando porque se está demostrando que la demanda está rebasando la disponibilidad de agua”.
Finalmente Marcos Irineo ve esta problemática como un buen momento para reflexionar sobre el cuidado que merecen los recursos de la Tierra. De paso recomienda supervisar el pronóstico del clima constantemente, para estar prevenidos.
“Es bueno saber qué es lo que está sucediendo, que tengan (los ciudadanos) más conciencia del cuidado del agua porque sí hay escasez y puede durar un poco más (…) deben estar al pendiente de saber cómo viene la temporada de lluvias, los calores, todos los fenómenos meteorológicos”.
EL FENÓMENO DE “EL NIÑO” Y “LA NIÑA”, ¿POR QUÉ LO LLAMAN ASÍ?
Al principio de este artículo el experto mencionó dos fenómenos catalogados como “el niño” y “la niña”. Al preguntarle sobre el origen de este término, explicó que “el niño” se llama así porque los nativos de Perú, empezaron a notar que en vísperas del Navidad o del nacimiento del Niño Jesús los peces de aquella zona amanecían muertos por la falta de alimento (plancton) que escaseaba porque el agua de los océanos se calentaba en esas fechas, para el mes de diciembre.
Cuando los científicos empezaron a notar esos cambios en las temperaturas del océano nombraron a este fenómeno como “el niño”, para referirse a la temporada en que el agua se calienta más de lo normal. Ya el término de “la niña” se atribuyó al efecto contrario, cuando el agua se enfría más de lo normal.