Irapuato.- Ángel sonríe. La expresión infla sus mejillas y sus ojos se cierran, es una sonrisa auténtica, está enviando un saludo a las personas que lo ven desde una pantalla y que hoy lloran su muerte. El video de solo cuatro segundos logró capturar la esencia alegre del joven asesinado por la Guardia Nacional.
En la grabación se ve Ángel conviviendo con sus amigos, como el último día de su vida. La cámara graba algunos universitarios y después aparece a cuadro el estudiante de agronomía de 19 años.
Alsa el pulgar y sonríe a la cámara, después de manera humilde se toca el corazón con ambas manos y vuelve la mirada alegre hacia sus amigos para continuar conviviendo con ellos. Este es uno de los más recientes videos que circulan del joven, pero no el único.
Otro video que ha sido visto 53 mil veces captura los momentos felices de Ángel con sus amigos cercanos. A la grabación la acompaña la canción “Golden” (oro, en español) de Harry Styles.
“Sabía que eras demasiado brillante para mí. No tengo esperanza, estoy roto, así que me esperas en el cielo, bronceas mi piel muy bien. Eres de oro” dice la canción.
En el video se ve a Ángel siendo él mismo. Cariñoso con sus amigos, les extendía los brazos buscando un abrazo. Sacaba a bailar a sus amigas y cantaba con todos. También se aprecia al joven durante las clases, sonríe recargado en la pared y participa en sus sesiones escolares virtuales. El distanciamiento social que llegó con la pandemia no impidió que el estudiante conectara con sus compañeros y generara un vínculo con ellos que se fortaleció por la sencillez de Ángel.
Lo que sabemos del caso que investiga Derechos Humanos
El 27 de abril por la tarde, Ángel, Lalo, Edith y Laysa estaban en una convivencia con compañeros de la escuela, eran 12 personas en total. Se encontraban en un terreno en la comunidad de El Copal en Irapuato, a 100 metros del campus de la Universidad de Guanajuato, donde estudiaban.
Ante la presencia de la Guardia Nacional, los jóvenes se retiraron en varios vehículos y los últimos en irse fueron ellos cuatro. Los elementos les pidieron detenerse, pero, según la versión de Lalo, ellos temían abuso de autoridad de parte de la Guardia Nacional, por lo que omitió las indicaciones.
Uno de los elementos descendió de la unidad y les disparó. Según la versión de la corporación militar, en ese momento estaban realizando un operativo contra el huachicol en los alrededores.
Una bala le quitó la vida a Ángel y otra hirió a Edith, que tuvo que ser sometida a cirugía. Ella ya está estable, pero la comunidad estudiantil de las abejas, como se le conoce a los estudiantes de la UG, se tambalea por la muerte de Ángel.
Los hechos desencadenaron en marchas estudiantiles en distintos municipios. Las dos principales se llevaron a cabo al día siguiente del asesinato, una en la mañana y otra en la tarde. En ambas participó el rector Luis Felipe Agripino, quien al enterarse del ataque declaró que “estaban conviviendo y fueron agredidos. (...) No había motivo alguno para que fueran agredidos”.
Vicente Esqueda, procurador de Derechos Humanos en el Estado de Guanajuato informó que abrieron una investigación sobre el ataque de la Guardia Nacional a estudiantes de Guanajuato. Esta será enviada a la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, gobernador de Guanajuato, condenó los hechos que se derivaron del “uso desproporcionado de la fuerza por parte de un elemento de la Guardia Nacional".
El elemento quedó detenido y la Fiscalía General del Estado le pasó el caso a la Fiscalía de la República.
PR