León, Guanajuato.- Octubre es el mes del terror por excelencia. Los adornos, disfraces y la fantasía reinan en cada rincón de las ciudades para mantener ese toque escalofriante. Pero también vale la pena contar las historias con un final triste. El cierre de negocios y la parálisis de actividades en diversos sectores por la pandemia mundial crearon historias de horror para todos los que vieron afectados sus ingresos.
En la capital del calzado, los dueños de restaurantes, bares, cines y hoteles padecieron los efectos del letal virus que no solo llegó a cambiar nuestra ‘normalidad’ de forma radical, también llegó a ponerle punto final a inversiones y fuentes de ingresos que habían perdurado desde hace años.
Hoy día la recuperación económica en todo el estado de Guanajuato va en ascenso, pero es incuestionable que las historias de terror que nos dejó la pandemia serán recordadas por siempre, sobre todo por los que las vivieron.
Los fantasmas y espectros de la crisis económica se hicieron presentes en estos negocios:
GRANTS
La cocina del mundo cerró sus puertas en León. Aquellas instalaciones concurridas y luminosas que eran el lugar perfecto de celebración hoy están totalmente vacías. El gigantesco edificio que alguna vez estuvo lleno de comida ahora está inundado de oscuridad y de los ecos almacenados en sus paredes. Los automovilistas que transitan sobre el bulevar Mariano Escobedo guardan el recuerdo del que fuera uno de los establecimientos consentidos de los leoneses.
Consolidado como uno de los restaurantes más populares en la ciudad, luego de una década al servicio de los leoneses se anunció el cierre definitivo del lugar a principios de junio de 2020.
GLOTONE
Otro restaurante famoso en la ciudad. Una de sus particularidades era la ubicación en una zona privilegiada del centro de la ciudad, justo a un lado del Arco de la Calzada. Casi a finales del año pasado se dio a conocer la noticia de su cierre debido a la contingencia sanitaria. Ahora el silencio es el cliente número uno. Las puertas cerradas y un aspecto deteriorado del inmueble ‘asustan’ a los que pasan a lado del sitio.
SANBORNS
La sucursal de Sanborns ubicada en el Hotel Hotsson cerró sus puertas de manera definitiva tras más de 27 años en la ciudad. La tienda departamental que fue por muchos años fuente de ingresos para sus empleados y espacio de convivencia para clientes en el restaurante dijeron adiós el primer día de este 2021.