La tranquilidad madrugadora del Rancho Franco Tavera fue rota por una serie de detonaciones. Eran las 3:00 horas del domingo 2 de agosto, el operativo contra José Antonio Yépez Ortíz, “El Marro”, había comenzado.
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), apoyados por la Fiscalía General del Estado de Guanajuato, rodeaban al líder del Cártel Santa Rosa de Lima, quien se encontraba dormido dentro de un inmueble del rancho ubicado en el municipio de Juventino Rosas.
La sorpresa, sin embargo, no evitó que “El Marro” respondiera al operativo, no se encontraba solo.
Saulo Sergio, alias “El Cebollo”, reaccionó al movimiento de las fuerzas federales y ordenó el repele de las agresiones.
“El Cebollo” era el jefe se seguridad de “El Marro”, el último que tendría el líder huachicolero tras su detención.
Poco se sabe de este jefe se seguridad de Yépez Ortiz, de quien otro de sus apodos es “El Salulo”.
Saulo Sergio acompañó a Yépez Ortíz en sus últimas semanas en libertad, cuando el acecho de las fuerzas federales y estatales ya le pisaban los pies.
Trasciende que estuvo con él cuando “El Marro” grabó los dos videos, uno de ellos en el que está a punto de las lágrimas, tras el operativo en su contra, en el que por suerte para él no estuvo presente, que terminó con la detención de su madre y su prima en Celaya.
Una especie de Iván Gastélum para “El Marro”, el famoso “Cholo Iván”, quien acompañó a Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, hasta su tercera y última detención en enero de 2016.
Cuando “El Cebollo” supo de la presencia del Ejército, llamó a los cuatro sicarios que los acompañaban a defender a “El Marro”.
La última resistencia de “El Marro” estuvo encabezada por “El Cebollo” y formada por Raúl Alberto, alias “El Diente”; Silvestre; Guillermo y José Cruz.
Se desconoce si José Antonio Yépez Ortiz también fue partícipe activo del intercambio de balazos.
El intercambio de balazos entre los criminales y las fuerzas del orden duraron alrededor de media hora.
Los elementos del Ejército sometieron a “El Marro”, “El Cebollo” y a sus cuatro sicarios, dejando como saldo sólo uno de ellos herido de un pie.
La sorpresa de las fuerzas federales vino al saber el arsenal con el que contaba el jefe de seguridad de “El Marro”, pues no solo contaba con armas largas y cortas, sino también con un lanzagranadas.
El decomiso fue de cinco armas largas, tres armas cortas, un lanzagranadas, una camioneta, una cuatrimoto y una motocicleta.
La última batalla de “El Marro” fue encabezada por “El Cebollo”, quien ahora -como su jefe- recordará sus andanzas en el crimen desde prisión.
rgg