El sábado pasado, como una de las últimas decisiones de su administración, Eruviel Ávila autorizó el aumento del transporte público en el Estado.
El transporte concesionado aumentó dos pesos el pasaje mínimo, es decir, la tarifa pasó de ocho a 10 pesos. Además, el Mexicable, el cual tiene menos de un año de inaugurado, y Mexibús subieron un peso su precio para llegar a siete pesos por viaje.
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Esta cifra convierte al Estado de México, como una de las entidades con el pasaje mínimo más caros del país, junto con las entidades de Nuevo León, Guanajuato, Durango, Coahuila y Guerrero, donde el pasaje mínimo alcanza los 10 pesos.
El argumento de las autoridades mexiquenses del aumento son dos: el alza en el precio de la gasolina y el compromiso de los trabajadores a renovar unidades, capacitar operadores, instalar medidas de seguridad como botones de pánico y dar beneficios a grupos vulnerables.
Sin embargo, en mayo de 2013, cuando Eruviel Ávila avaló el aumento del pasaje, prometieron mejoras al transporte, las cuales nunca llegaron.
Además, desde que se dio el “gasolinazo”, en enero pasado, varios transportistas subieron de manera arbitraria el precio de pasaje mínimo de ocho a 10 pesos, así como de demás rutas, con motivo el costo del combustible, así como la presión y amenaza de los dueños de las concesiones.
Incluso circularon misivas, las cuales eran pegadas dentro de las unidades del transporte, donde señalaban que “habrá operativos en los diferentes paraderos”, realizados por “operadores de otras empresas” para constatar que se esté cobrando el incremento, no autorizado en ese entonces, en la tarifa.
El documento emite una alerta final a los operadores, en donde advierte que aquel que sea sorprendido “no cobrando el incremento” se hará acreedor a una multa de mil pesos.
Al respecto, la Secretaría de Movilidad del Estado de México, llamó a denunciar a quienes realizaran dicho aumento.
Los comicios
El alza ilegal de los transportistas cesó apenas iniciaron las elecciones a la gubernatura del Estado de México.
En cambio, aparecieron, las unidades del transporte concesionado con leyendas de apoyo al candidato del PRI y del partido en el poder, Alfredo del Mazo Maza.
“Vamos con Del Mazo”, “vamos todos a la par, brazo con brazo y mano con mano, Alfredo del Mazo gobernador”, “Unidos con Del Mazo”, “En apoyo Alfredo del Mazo a la gubernatura”, fueron algunas de las leyendas que se podían leer en las combis y camiones.
En esa ocasión, transportistas aseguraron, de manera anónima a diferentes medios, que las insignias a favor del candidato priista era una orden de los dueños de las concesiones.
Hoy, a poco más de tres meses de las elecciones en el Estado de México el 4 de junio, y luego de que el Instituto Electoral de la entidad mexiquense (IEEM) diera el triunfo a Del Mazo, el gobierno saliente de Eruviel Ávila concede un nuevo aumento al transporte.
Además, al día siguiente de los comicios, el 5 de junio, otro de los transportes colectivos del estado, Ferrocarriles Suburbanos, aumentó su tarifa. El viaje corto pasó de 7 a 7.50 pesos y el largo de 16 a 17.50 pesos.
Asaltos
Además de la carestía del transporte, los mexiquenses tienen que lidiar con la inseguridad, las irregularidades de las unidades, así como el tiempo de traslado.
El delito más frecuente en el Estado de México es el asalto al transporte público, de acuerdo con la última edición de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción Sobre Seguridad Pública (Envipe), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La constancia de los delincuentes dentro de las combis y camiones mexiquenses, incrementó los casos de linchamientos y justicieros.
Así lo señala la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) en su estudio “Linchamientos en México: recuento de un periodo largo (1988-2014)”, donde coloca al Estado de México, junto con Puebla y la Ciudad de México, como la entidad con mayor número de linchamientos.
En 26 años, en materia de linchamientos, el territorio mexiquense registró 109 casos consumados y más de 90 intentos, los cuales, en gran parte, se suscitan contra delincuentes en el servicio público de transporte.
El peligro dentro del transporte no sólo es causado por asaltantes, sino también por choferes de las unidades.
En los últimos dos años, los accidentes en el transporte público del Estado de México se duplicaron, al pasar de 72 eventos entre enero y agosto de 2014 a 155 incidentes en el mismo periodo, pero de 2016.
Mientras que el número de lesionados en los percances se triplicó al aumentar de 179 a 568 personas con heridas, según información de la Secretaría de Movilidad del Estado.
Además de la peligrosidad de viajar en ella, existe una falta de rutas, lo que representa la pérdida de tiempo al trasladarse en el transporte público, así como más gastos para el usuario al utilizar más unidades para llegar a su destino.
Esto de acuerdo con el estudio “Estado de México: Movilidad 2025”, realizado por el Centro de Transporte Sustentable (CTS), el cual detalla que el 63% de los mexiquenses ocupa de dos a cuatro transportes en sus recorridos, en tanto, 31% emplea cinco o más.
El mismo estudio señala que un usuario con un recorrido normal, casa-trabajo-casa, puede tardar en el tráfico aproximadamente cuatro horas de su día, lo cual representa una pérdida diaria de 30 millones de pesos en traslados a la Ciudad de México debido a 1.5 millones horas-hombre desperdiciadas.
Eruviel se va, pero deja a su paso un transporte público caro, peligroso, ineficiente y carente de rutas.